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Construir un relato de la patria desde las provincias argentinas

Desde Paraná, un proyecto editorial acotado en el tiempo pero de intensa demanda y notable influencia posterior, intentó entrelazar literatura e historia para avanzar en la conformación de un relato múltiple sobre la patria, pero escrito desde las realidades provinciales que la constituían. Se llamó la “Revista del Paraná” y se planteó nombrar la Nación por encima de las disputas políticas.

Rubén I. Bourlot / [email protected]

 

En 1861 aparece en Paraná, capital aún de la Confederación, La Revista del Paraná. Una revista excepcional que solía agotar sus ediciones de un tiraje considerable para la época.

Para Ofelia Sors, La Revista del Paraná constituyó “un órgano periodístico de jerarquía, esencialmente histórico-literario, cuyo fundador y director fue el destacado hombre de letras Dr. Vicente G. Quesada.

Historias de la solapa
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Fragmento del primer número de La Revista del Paraná.

Vicente G. Quesada.

Carlos Casavalle.

Juana Manuela Gorriti.

“Apareció esta revista de sesenta páginas, desde el 28 de febrero de 1861, hasta el 30 de setiembre del mismo año. Entre sus colaboradores figuraba lo más selecto de la legión de escritores de esa época: Benjamín Victorica, Joaquín María Ramiro, Cnel. Juan Elías, José Tomás Guido, Facundo Zuviría, Benedicto Ruzo, Saturnino M. Laspiur, Juana Manuela Gorriti. Benjamín Villafañe, Damián Hudson, Ángel Elías, Juan María Gutiérrez, José Francisco López, Juan Bautista Alberdi (desde París), Ramón Ferreyra, Baldomero García, Jerónimo Espejo, Barón de Vid Castel y Amadeo Brougnes, y entre los colaboradores del exterior: los chilenos Barros Arana, Juan Ramón Muñoz, Francisco Bilbao, Fernando Urizar Garfias, Manuel Guillermo Carmona y los peruanos Ricardo Palma, J. A. de Lavalle y Francisco Lazo.

“Se debió la impresión de esta excepcional revista, cuyo tiraje alcanzó a mil ejemplares por edición, al no menos conocido librero e impresor Carlos Casavalle. La primera tirada fue de seiscientos números, pero, ante el éxito de la demanda, se hace necesario reimprimir 835 más. Cientos de suscripciones suman entre las de la capital de la Confederación y provincias, además de las de Montevideo, Salto, etc.”

“La colección de la Revista del Paraná constaba de ocho entregas mensuales en fascículos, y cada entrega contenía tres secciones: Historia, Literatura y Jurisprudencia. Luego se incorpora una sección más, la de Economía Política. Lamentablemente, tan extraordinaria publicación cesa de aparecer a raíz de los acontecimientos de setiembre de 1861.”

 

Equilibrio

Miguel Ángel Andretto agregó que “por la equilibrada factura de su contenido, constituyó un modelo para otras similares, que aparecerían años más tarde, como la Revista de Buenos Aires y la Revista del Río de la Plata, ejemplos de la proyección cultural de la Argentina hacia otros medios de la época.”

Y agrega el autor de El periodismo en Entre Ríos, un detalle de sus contenidos más valorados: “Literatura, que era la sección más rica, con poesías, novelas, cuentos y ensayos, entre los que destaca ‘Güemes, recuerdos de la infancia’ de Juana Manuela Gorriti (1818-1892), inspirada en el período salteño de la lucha por la independencia. Filología, que con ‘Netzahualcoyotl’, en nahuatl, revela la importancia de las lenguas americanas durante el proceso de independencia, cuya proclama se efectuara en español, quichua, aymará y guaraní. Fueron así protagonistas de ese formidable emprendimiento, que significaba la búsqueda de la confraternidad entre las naciones hispanoamericanas.”

También Martiniano Leguizamón se desgrana en elogios.  “De todas las publicaciones aparecidas, en ese tiempo, ninguna de tanto valor histórico y doctrinal como la ‘Revista del Paraná’, que abría la era de los estudios históricos sobre los orígenes y fundación de los pueblos de la República y la descripción física, de las costumbres, las crónicas y memorias de la época colonial, la guerra de la Independencia y las luchas civiles, continuada en tiempo posterior por La Revista de Buenos Aires y La Revista del Río de la Plata etc.”, dijo.

Los hombres del Paraná

Este conjunto de hombres y alguna mujer también, como fue Juana Manuela Gorriti, que escribieron “La Revista del Paraná”, constituyó una verdadera generación del pensamiento nacional latinoamericano.

En el prospecto de la publicación, Quesada manifestaba: “Creemos que la revista será un medio eficaz para propender a la formación de un círculo literario nacional que se consagre preferentemente al estudio de nuestro país y lo dé a conocer en todos sus aspectos; que preste a la historia, a la literatura y a la legislación americana una atención especial, poniéndonos al corriente del movimiento intelectual de la Repúblicas hispanoamericanas.”

Por su parte Jorge Abelardo Ramos agregó que “los hombres del Paraná fueron aquellos que rodearon a la Confederación Argentina cuando la oligarquía porteña rehusó plegarse a la unidad del país, reteniendo con su avaricia portuaria la Aduana y la Capital. No eran todos provincianos los que apoyaron a Urquiza durante aquella larga separación. Por el contrario, había numerosos porteños y bonaerenses, a quiénes más tarde veríamos unirse a las tendencias nacionales de Avellaneda y de Roca. En el Paraná, ya lo hemos dicho, no sólo se reunieron, los guerreros de la independencia -los Alvarado, Guido, Pedernera, Iriarte, Espejo, Roca-, sino también los intelectuales que habrían de apuntalar a la generación del ‘80 con su gran prestigio. Los ejemplos son innumerables: Vicente G. Quesada, que ha evocado esa época en sus «Memorias de un Viejo», Carlos Guido y Spano, Lucio V. Mansilla; Nicolás A. Calvo, Benjamín Victorica, Mariano Fragueiro, y, sobre todo, Alberdi. Estará allí, asimismo, un joven llamado José Hernández.”

El librero de la patria

Una mención especial merece el impresor de la revista, Carlos Casavalle. Nacido en Montevideo en 1826, a temprana edad se trasladó a Buenos

Aires, donde estudió con los jesuitas, trabajando simultáneamente como

tipógrafo del Diario de la Tarde de Pedro Ponce. Luego se desempeñó en varios periódicos y en 1853 imprimió los primeros libros aparecidos en la década.

En 1860 se trasladó a Paraná donde se desempeñó como impresor oficial del Gobierno de la Confederación Argentina y dirigió el Boletín Oficial que reemplazó a “El Nacional Argentino”.

La labor de Carlos Casavalle en Entre Ríos contribuyó a difundir el pensamiento y las medidas de gobierno del presidente Urquiza. En 1961 se hizo cargo de La Revista del Paraná.

 

Bibliografía a consultar

– Bibliografìa: Sors, Ofelia, (1994), Paraná. Dos siglos y cuarto de su evolución urbana (1730 – 1955), Impr. Los Gráficos, Victoria, 2ª Ed.

– Andreetto, Miguel Ángel, (2009), El periodismo de Entre Ríos, en Historia del Periodismo Argentina, Vol. IV, Academia Nacional de Periodismo, Bs. As.

– Ramos, Jorge Abelardo, (1976), Del patriciado a la oligarquía, 6ª. Ed. Plus Ultra, Bs. As.

https://www.mininterior.gov.ar/agn/pdf/Casavalle1.pdf

Más temas sobre nuestra región en la revista digital Ramos Generales, disponible en http://lasolapaentrerriana.blogspot.com/

 

 

 

 

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